Título: Amarilla (Yellowface)
Autor: R. F. KUANG
Genero: Sátira/Suspenso
Fecha de publicación: 2023
Portada:
Sinopsis: Athena Liu es una escritora famosa y June Hayward es una escritora a la que no conocen ni en su casa. Cuando Athena muere de forma tan inesperada como extraña, June le roba su último manuscrito. Y no solo eso: lo publica como si fuera obra suya. Sin embargo, hay evidencias que amenazan con poner en peligro el éxito que June ha conseguido de manera tan (por decirlo finamente) cuestionable. Y es entonces cuando descubre hasta dónde está dispuesta a llegar para conservar la vida que ella cree que merece. CON ESTA EMOCIONANTE Y AFILADÍSIMA NOVELA, REBECCA F. KUANG, LA AUTORA SUPERVENTAS NÚMERO 1 DEL NEW YORK TIMES, LOGRA QUE , NOS PREGUNTEMOS: ¿Y SI, ANTE EL ÉXITO, TODOS SOMOS BUITRES?
Hoy exploramos el fenómeno literario del año pasado: “Amarilla”, también conocido como “Yellowface”, la provocativa obra de R. F. Kuang. Este libro nos arrastra a las profundidades del mundo literario contemporáneo, ofreciendo una sátira mordaz de los temas más candentes de nuestra época. A través de una historia ficticia, Kuang logra un eco sorprendente con la realidad palpable de la industria.
Además no podía evitar formar parte de la realidad que crítica la autora, poniendo de manifiesto cómo caemos presa del marketing, comprando y debatiendo sobre lo que está en boca de todos, en un ciclo perpetuo alimentado por las redes sociales.
El estilo:
Sin haber leído previamente a Kuang, me adentré sin expectativas en su estilo narrativo. En “Amarilla”, ella elige una narrativa franca y despojada de florituras, lo que facilita una inmersión total en la trama. La prosa es ligera y fluida, dotando al libro de un ritmo que captura al lector con facilidad.
No obstante, este estilo tan directo se ve ocasionalmente interrumpido por digresiones que requieren aclaraciones en notas a pie de página, rompiendo el flujo de la lectura. El clímax de la obra introduce un cambio drástico; la narración se ralentiza y se sumerge en lo surreal, desviándose del tono establecido anteriormente.
El final abierto, lejos de ser un gancho intrigante, me provocó una sensación de desasosiego, un elemento que considero molesto y superfluo en el contexto de la historia.
Los personajes:
“Amarilla” nos presenta a June Hayward como protagonista y narradora, una elección que se revela intrigante debido a su falta de fiabilidad. Este recurso literario enriquece la obra, desafiando al lector a cuestionar sus propias percepciones y a discernir entre realidad y ficción.
June, lejos de ser un modelo de virtud, despierta una curiosidad perversa: nos incita a descubrir hasta qué extremos puede llegar en su búsqueda de reconocimiento y qué falacias está dispuesta a tejer para justificar sus acciones. Desde el comienzo, nos encontramos con una autora consumida por la envidia hacia su amiga Athena Liu, cuyo éxito literario se convierte en el motor de la narrativa.
A medida que la historia se despliega, queda claro que todos los personajes de “Amarilla” son intencionadamente repulsivos, reflejando así la disfuncionalidad del mundo editorial y, por extensión, de la sociedad en la que vivimos.
R. F. Kuang nos presenta en “Amarilla” una trama intrincada, rica en matices y detalles sutiles. Lo que inicia como una aparente rivalidad literaria entre dos escritoras, se despliega en una exploración de temas cada vez más densos y polémicos. La novela se sumerge en las sombras del mundo editorial, enfrentando cuestiones de censura, apropiación cultural, plagio y racismo. Kuang, sin tomar partido, nos invita a reflexionar sobre los dilemas de nuestros tiempos, permitiendo que el lector forme sus propias opiniones. A través de la perspectiva distorsionada de June, y sus a menudo engañosas conclusiones, somos testigos de la lucha por la autenticidad y el éxito en un entorno saturado de controversias morales y debates digitales. La obra también aborda la anonimidad en las redes sociales que fomenta críticas destructivas, así como temas de venganza, culpa y hasta las ventajas y desventajas de la fama.
La narrativa me cautivó, me entretuvo y me impulsó a reflexionar. El desenlace, que involucra las escaleras y las voces de ultratumba, sin embargo, es tan poco creíble que llega a rozar lo absurdo. Me decepcionó, porque desentona con el realismo crudo del resto de la obra.
“Amarilla” es una novela que no se conforma con ser una simple historia; es un espejo que refleja las tensiones actuales del mundo literario y más allá. No es una lectura para quienes buscan un refugio en las páginas de un libro, sino para aquellos dispuestos a confrontar una realidad a menudo incómoda y cruda. Esta novela no te proporcionará consuelo ni empatía hacia sus personajes, ni desearás habitar su mundo. Sin embargo, al cerrar el libro, te encontrarás contemplando cómo, de alguna manera, ya formas parte de esa realidad, te guste o no.
.png)
Hazlo o no lo hagas. Pero no lo intentes.
0 comments:
Publicar un comentario